Uno de mis descubrimientos desde que estoy en Barcelona han sido los Viñedos Singulares, una casa que aglutina vinos de diferentes denominaciones de origen y que están presentes en los principales locales de la ciudad. Llaman mucho la atención por las etiquetas, por eso es muy normal caer en sus redes solo por el envoltorio. Pero si el envoltorio gusta, lo de dentro es la gran sorpresa.
Hace un par de semanas nos invitaron a un maridaje entre Viñedos Singulares y Caravan Made. Para quien no lo conozca Caravan Made son las caravanas molonas que encontramos en los Eat Street los últimos meses. Pues de la unión entre el buen vino y la comida rápida de calidad vivimos un maravilloso #MomentoAfortunado. Seis vinos y seis platos, aquí van un par de ejemplos para que os hagáis a la idea de la maravillosa función que vivimos:
– Tataki atún con salsa teriyaki y piña con Vino Afortunado
-Pincho de pera con queso azul, salmón y reducción de vinagre de uva con Vino Luna Creciente
-Secreto ibérico con salsa de ibèricos y arandanos con Vino Corral del Obispo
Los chicos de Viñedos Singulares nos reunieron a un grupo muy divertido con ganas de comer, beber y pasarlo bien. Y rodeados de un dj estupendo que pinchaba música de la de bailar (Rafaela Carrá y esas cosas), un fotógrafo que captaba cada momento y nuestros móviles en la mano para no perder detalle y compartirlo en Snapchat, se nos pasó la noche volando.
Fotografía Raul Muñoz
Besitos
Erika